jueves, 22 de octubre de 2009

Permite, Padre, que mi patria
se despierte en ese cielo
donde nada teme el alma,
y se lleva erguida la cabeza;
donde el saber es libre;
donde el mundo no está
roto en pedazos
por las paredes caseras;
donde la palabra surte
de las honduras de la verdad;
donde el luchar infatigable
tiende sus brazos a la perfección
y los justos ya no son perseguidos;
donde la clara fuente de la razón
no se ha perdido
en el triste arenal desierto
de la yerta costumbre.
Permíte, Padre mío, que mi patria
se despierte en ese cielo
de libertad.

Rabindranath Tagore

(traducción de Zenobia Camprubi)

miércoles, 21 de octubre de 2009

ÍTACA

Cuando salgas de viaje para Ítaca,
desea que el camino sea largo,
colmado de aventuras, de experiencias colmado.
A los lestrigones y a los cíclopes,
al irascible Posidón no temas,
pues nunca encuentros tales tendrás en tu camino,
si tu pensamiento se mantiene alto, si una exquisita
emoción te toca cuerpo y alma.
A los lestrigones y a los cíclopes,
al fiero Posidón no encontrarás,
a no ser que los lleves ya en tu alma,
a no ser que tu alma los ponga en pie ante ti.

Desea que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas estivales
en que -¡y con qué alegre placer!-
entres en puertos que ves por vez primera.
Detente en los mercados fenicios
para adquirir sus bellas mercancías,
madreperlas y nácares, ébanos y ámbares,
y voluptuosos perfumes de todas las clases,
todos los voluptuosos perfumes que te sean posibles.
Y vete a muchas ciudades de Egipto
y aprende, aprende de los sabios.

Mantén siempre a Ítaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Pero no tengas la menor prisa en tu viaje.
Es mejor que dure muchos años
y que viejo al fin arribes a la isla,
rico por todas las ganancias de tu viaje,
sin esperar que Ítaca te va a ofrecer riquezas.

Ítaca te ha dado un viaje hermoso.
Sin ella no te habrías puesto en marcha.
Pero no tiene ya más que ofrecerte.

Aunque la encuentres pobre, Ítaca de ti no se ha burlado.
Convertido en tan sabio, y con tanta experiencia,
ya habrás comprendido el significado de las Ítacas.

C. P. Cavafis, Poemas.

http://www.youtube.com/watch?v=eCz0y-IXbdc&NR=1&feature=fvwp


EL GRAN CAMINO NO ES DIFÍCIL,
SÓLO LE REPELE ESCOGER Y SELECCIONAR.
SI NO HAY RECHAZO NI APEGO
TODO ESTÁ CLARO Y ES EVIDENTE
Sosan Daishi, Shinjinmei

domingo, 18 de octubre de 2009


"Es cierto, es cierto; para hacer lo que es posible basta con querer. Todo depende de la plenitud con que se entienda ese fácil vocablo. Es fácil decir y aun pensar que se quiere; pero es difícil, muy difícil, querer de verdad. Querer hacer algo exige que queramos todas las cosas que son precisas para su logro, entre ellas dotarnos a nosotros mismos de las cualidades imprescindibles para la empresa. Lo demás no es querer algo, es simplemente desearlo, enjuagarse con su imagen la fantasía, embriagarse voluptuosamente con el proyecto, perderse en vagos ardores, bullangas y efervescencias".
Ortega y Gasset, Misión de la Universidad

jueves, 4 de diciembre de 2008

Me resulta difícil escribir. Hay una gran distancia, un enorme abismo entre el pensamiento y la acción. Casi todos los días llevo conmigo el ‘pensamiento de la acción’, pero rara vez pasa de esto. La acción no se lleva a cabo, no se cumple, no se ejecuta; y, si la comienzo, queda prontamente suspendida por otras acciones no premeditadas o nuevos pensamientos de acción. El engaño resulta más triste, porque creo que, en el fondo, realizo esas acciones pensadas. Y no es así. Es por ello que tengo habitualmente esa ebullición de pensamientos, propósitos, impulsos hacia el futuro que, sin embargo, no cristalizan en la acción sencilla, breve, bien hecha, sin más resultado que ella misma. Y entonces aparece el viejo cuento manido del tiempo perdido, de lo que hay por hacer, de la odiosa comparación, de los balances inútiles ... de todo eso que me aburre soberanamente y que ya no me convence.

Hay una evolución decisiva en esto último: porque antes, me refugiaba en ese espíritu de desesperación, mitad existencial, mitad estética, esa pose de fatalismo pseudo-romántico que me ha gustado cultivar. Ahora, tampoco me siento a gusto en ello. Tengo la impresión de que regresando a ese espacio se cierran otros aún sin explorar, prometedores, igual de creativos o más conscientes que esa afección modernista, herencia adolescente, de recrearse en las propias miserias. Hay que mirar al frente y asumir la realidad; manifestarse tal como se es. Es, sin darme cuenta, la formulación que he verbalizado en más de una ocasión, en otras circunstancias, sin darme cuenta de ello y sorprendiéndome al tiempo que le daba forma sonora ante otras personas.